CRONICA DE UN LOCO DEL DEPORTE: CRÓNICA Zumaia Flysch Trail 2012

martes, 24 de julio de 2012

CRÓNICA Zumaia Flysch Trail 2012

Un año atrás en la línea de llegada me juré volver y cumpliendo una promesa , un año después estaba en la línea de salida . La mañana había amanecido perfecta , 19º y un poco nublado aunque durante la carrera se despejó y nos calentó bastante la última hora de carrera .

Me coloqué en primera fila de la línea de salida , pues las ganas de competir me recorrían los huesos , hacía casi mes y medio que no me colocaba un dorsal ( carrera de montaña pencona ) , aunque tampoco estaba seguro de mi estado de forma . Se dio la salida puntual y desde el primer metro se salio a cuchillo , parecía más una media maratón que una carrera de montaña , pues sus dos primeros kilómetros son por asfalto , el grupo era numeroso y comandado en todo momento por EL HABID BOUALI .

Nada más tocar tierra , comenzamos a subir primero por un sendero y a continuación por unas campas, en ese momento la cabeza de carrera era comandada por Zaid Ait Malek y al ser tan numeroso el grupo de cabeza , decidí coger su espalada , pero a media subida, cogí la cabeza de carrera y marque un ritmo vivo para seleccionar la carrera y al coronar ya formamos el grupo de cabeza Zaid Ait Malek , EL HABID BOUALI y yo .

Hasta el kilómetro 18 , fuimos los tres en cabeza , comandados por Zaid en un par de bajadas forcé un poco la carrera para ver las fuerzas de mis compañeros de fuga y no cedieron ni un metro ,eso ya me hizo entender que había que guardar , y no mover mucho el gallinero si no quería salir desplumado , intente beber agua y sales en todos los avituallamientos y comí en el kilómetro 5 , 12 y 19 una pasa de fruta de Isostar .

En la subida en el Kilómetro 18 Zaid aumento el ritmo , hasta que nos descolgó a Habid y a mi .

Desde el kilómetro 18 al 24 Habid y yo marchamos de la mano , pero a partir del kilómetro 24 Habid ya sin fuerzas , pues no había comido ni bebido nada durante la carrera , dado a que se encontraba de ramadán .

Ya en la subida a la ermita de San Telmo , me encontré con el famoso muro , que los corredores de maratón se encuentran en el kilómetro 35 , mi cuerpo paso en apenas un kilómetro de ir a un buen ritmo a no tener ni casi fuerzas para poder subir andando los dos últimos repechos de la jornada .